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lunes, 10 de enero de 2011

Lección 2: Creando la historia

¡Hola a todos!

La historia
Un vez que hemos econtrado la idea para hacer nuestro cortometraje tenemos que contar la historia. Cuando queremos contar una historia, millones de ideas se nos vienen a la cabeza. Ahora tenemos que aprender a organizarlas y desechar aquellas que rompan el ritmo.

El método que más se utiliza es la escaleta. ¿Y eso que es? Pues la mejor forma de ver el ritmo que va a tener tu cortometraje o historia antes de pasarla a la pantalla. Yo lo suelo hacer con posits o con trozos de papel 10,5x 7 (de un folio te salen 8). En cada una de esas tarjetas debes de escribir el nombre de la secuencia, un resumen de lo que ocurre en ella y la duración apróximada que deseas. Después puedes ponerlas en la pared con bluetac (el famoso chicle azul), o en un corcho con chinchetas. Ahora, repasa tu escaleta y valora si tiene buen ritmo y si consigues lo que quieres. Recuerda siempre que si eres director debes de estar dispuesto a sacrificar la escena que más te guste por el bien de la película.

Existe una estructura muy conocida y que suele funcionar bien:

Presentación de personajes.
Primer giro que da pié a la historia.
Desarrollo de la historia.
Segundo giro argumental.
Desenlace.
Conclusión.

Para que os hagáis una idea, he aquí una escaleta a medio hacer. Se trata de un largometraje que escribo junto a mi compañero Juan Carlos Palazón.

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Luego también existen las tramas paralelas a la historia, pero es algo más complicado de introducir y que no quede como un "pegote".

Os aconsejo para empezar, usar una "punta de lanza". Se le llama "punta de lanza" a cuando sucede algo sorprendente e impactante nada más comenzar, eso dará pié a que el espectador esté más atento a la historia que si empiezas con una secuencia tranquila y en la que no ocurre apenas nada.

Construir una historia buena no es cuestión de un día, es una carrera de fondo, hay que leer lo que se tiene, cambiar, valorar, volver a cambiar volver a valorar. Es muy duro, pero el resultado final merecerá la pena.



¡Un saludo y gracias por leerme!

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